«Me es grato comunicar mi admiración y gratitud hacia el notable pianista y escritor Diego Fernández Magdaleno por ya larga y fructífera carrera artística tanto en la faceta de escritor, que para mí ha sido una grata revelación y especialmente su trayectoria de intérprete al piano. A él debo el estreno y difusión de algunas de mis obras para este instrumento como Coral, variaciones y fuga, estrenado por él en la Casa Cervantes en Valladolid y organizado por la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción, a cuya Institución pertenece como Académico, y repuesta posteriormente en varias ocasiones y lugares, o de la reciente obra Encuentros con Strawinsky dedicado al propio pianista, recientemente.
Su dedicación y entrega a nuestra música actual es digna de los mejores elogios y espero y deseo que su activada artística siga adelante con el mismo interés y entrega que ha venido demostrando siempre.
Es para mí una gran satisfacción disfrutar de su amistad y espero corresponder con la mejor disposición y afecto.»